La cifra de pacientes con infección activa ha superado ya la barrera de los 18.000 (en concreto son 18.286 casos, 1.161 más).
El área sanitaria con mayor incidencia es la de A Coruña, cerca ya de sobrepasar las 5.000 personas enfermas (4.826), seguida de Vigo (3.349) y Santiago, a punto de rebasar la barrera de los 3.000 enfermos (2.947).
Según los datos del Sergas, todas las áreas sanitarias están por encima de los cien casos nuevos diarios.
Las peores cifras se dan en el área de A Coruña, donde se han confirmado por PCR 433 casos hasta las 18 horas del viernes, mientras que Vigo se sitúa en los 299 nuevos positivos y Ourense en los 179.
En Santiago se han confirmado 172 nuevos contagios y en Lugo 170. Pontevedra y Ferrol han tenido, respectivamente, 124 y 138 nuevos casos.
La positividad de las PCR (la capacidad diagnóstica se mantiene en las 12.000 diarias, aproximadamente) también supera el umbral de indicador de alto riesgo, fijado en un 10 %.
Hasta las 18 horas del viernes, el 12,5 % de las pruebas realizadas habían arrojado resultado positivo. Todas las áreas sanitarias están por encima de la barrera del 5 % que marca la OMS para tener un brote bajo control y por encima del 10 % están Vigo (15,8 %), Ferrol (15,4 %), A Coruña (15,2 %), Lugo (11,8 %) y Santiago (11 %).
Tanto Pontevedra como Ourense superan el 8 % de positividad de las PCR. Más preocupante es si cabe el balance de hospitalizaciones, que vuelve a incrementarse hasta las 967 personas ingresadas (35 más) y la tasa de hospitalización se mantiene en la horquilla del 5 %.
La presión asistencial sigue escalando hacia el pico de la primera ola. Hay cinco pacientes más en cuidados críticos, un total de 142 en las ucis gallegas, la mayoría en el área de A Coruña,con 264 personas ingresadas, 38 de ellas en la uci.
Vigo tiene 148 pacientes que requieren cuidados hospitalarios (22 en críticos) mientras que en Santiago la cifra de ingresados en cuidados intensivos es de 27.
Es la primera vez en diez días que el número de ingresados en el área compostelana desciende con respecto a la jornada anterior, tanto en camas convencionales como en críticos.
Este viernes ha muerto otras 15 personas por covid-19, con lo que desde el inicio de la pandemia ya son 1.599 las víctimas mortales, entre ellas un paciente de 46 años sin patologías previas. En los últimos cinco días se han notificado más de diez muertes diarias a causa del covid-19. Desde principios de año ha muerto 199 personas.
La tormenta perfecta en Galicia que solo se frenará con un confinamiento, según los expertos
Galicia ha vuelto a batir este viernes su récord de contagios en un día, 1.802, y la presión asistencial sigue subiendo, con 137 ingresados en UCI y 795 en planta. Núñez Feijoo ha señalado, no obstante, que Galicia sigue estando «entre las tres comunidades con menor presión asistencial en las UCI», por lo que ha pedido que se comprenda la situación que están pasando otras autonomías, varias de las cuales ya superan los mil casos de incidencia acumulada por cada cien mil habitantes en 14 días. El impedimento de ampliar el toque de queda y el empeoramiento continuo de los datos en Galicia son las principales razones que ha aducido el presidente gallego para confirmar que la próxima semana, «probablemente el lunes», habrá un endurecimiento de las restricciones tras la reunión del comité clínico. «Si el toque de queda funcionase y a las ocho (de la tarde) todos estuviéramos en casa las medidas podrían ser menores. Pero como no va a ser aprobado tendremos que usar otras herramientas para restringir la movilidad y determinadas conductas y comportamientos que tienen un mayor interacción social», ha advertido.
Caballero pide reforzar el personal sanitario para aplicar vacunas «coa maior celeridade»
De este modo, ha confirmado que estas medidas afectarán «más si cabe» a la hostelería, a la práctica del deporte y al aislamiento municipal, mediante restricciones de movilidad.
En la actualidad, tres municipios Arteixo, Xinzo y Viveiro tienen las máximas restricciones en Galicia, que podrían ser ampliadas «a buena parte» de la comunidad, según avanzó ayer el propio Núñez Feijoo. «Las comunidades estábamos esperando al toque de queda; todas, casi, pedíamos una herramienta más poderosa pero lamentablemente el Gobierno España ya no está al frente de la pandemia, sino que impide a las comunidades gestionar con medidas más razonables y nos aboca a tomar medidas más restrictivas: las tomaremos por responsabilidad», ha asegurado.
Durante su intervención, a preguntas de los medios, Núñez Feijoo ha comparado el liderazgo de los máximos responsables de los países del entorno de España, con medidas adoptadas en Portugal, Francia, Alemania y Reino Unido, con lo que ocurre en España. «Parece ser que quien lleva la pandemia (en España) es un ministro, que ya no es ministro, sino el candidato a unas elecciones (autonómicas) y cuando los presidentes autonómicos pedimos que se nos deje trabajar se nos impide. Lo más razonable para el Gobierno es rectificar, mucho mejor rectificar que persistir en el error», ha concluido. Tellado acusa a Sánchez de «poñer vidas en perigo» para «gañar votos» en Cataluña.
Promete controles para evitar nuevos errores de vacunación
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, ha prometido que se «intensificarán» los controles para garantizar que los primeros trabajadores del Servizo Galego de Saúde (Sergas) en vacunarse sean los que tienen «relación directa con los pacientes», tras conocerse este jueves que 17 informáticos del área sanitaria de Pontevedra-O Salnés habían recibido la primera dosis debido a «un error».
Esta comparecencia del presidente se produce horas después de que el gerente del Área Sanitaria de Pontevedra-O Salnés, José Ramón Gómez Fernández, reconociese en unas declaraciones que se había vacunado «por error» a 17 profesionales de informática a los que no les correspondía en esta fase.
Al respecto, Feijoo se ha remitido a las «disculpas» y «explicaciones» dadas por el gerente y a continuación ha admitido que, al haber «más de 40.000 personas trabajando» en el Sergas, «a veces se puede producir algún error como el que se produjo».
Eso sí, al margen de estos 17 informáticos, el presidente de la Xunta ha asegurado que, «por lo menos de momento, no se están produciendo errores».
Feijoo ha recalcado que las personas vacunadas por error «son empleados públicos que trabajan en la administración sanitaria», pero ha insistido en que «no les correspondía estar en la prioridad» del plan porque «no tienen contacto directo con los pacientes». En cualquier caso, ha comprometido a «intensificar la práctica de velar» por que quien reciba las dosis sean profesionales en primera línea de la pandemia, «ya sean médicos, personal de enfermería, personal auxiliar o personal de cocina que lleva la alimentación a unidades con enfermos de covid».
VACUNACIÓN DEL CONSEJERO DE CEUTA
Al hilo de esto, el presidente de la Xunta y líder del PP gallego ha sido preguntado por la negativa a dimitir del también popular consejero de Sanidad de Ceuta, Javier Guerrero, tras haberse vacunado contra la covid-19. «No conozco la explicación que (Guerrero) ha dado, pero sí digo que los políticos tenemos que dar un mensaje de ejemplaridad a la sociedad», ha sugerido Feijoo, quien ya este jueves instó a dimitir a los cargos que recibieron las dosis indebidamente -algunos de ellos de su partido-, como hizo el consejero murciano de Salud, Manuel Villegas.
Y es que, tal y como ha explicado Feijoo, en un momento en el que «hay enormes tensiones» y «todo el mundo lógicamente quiere preservar su salud», hay que «protocolizar» la administración de la vacuna ante la falta de dosis. «En este momento, los políticos tenemos que dar ejemplo. Espero que cualquier político de cualquier formación transparente su conducta y, si esa conducta no es transparente, cada uno debe asumir la responsabilidad que le corresponde», ha concluido.
Interior destituye al enlace de la Guardia Civil en el Estado Mayor de Defensa por vacunarse
Marlaska confirma que el teniente coronel recibió la primera dosis junto al Jemad y otros cargos y decreta su inmediata salidaLa primera consecuencia efectiva de la polémica vacunación de cargos militares y civiles en el Estado Mayor de la Defensa (EMAD), como el caso del jefe operativo de las Fuerzas Armadas, general Miguel Ángel Villarroya, ha llegado desde el Ministerio del Interior. El departamento dirigido por Fernando Grande-Marlaska acordó ayer por la tarde la destitución, con carácter inmediato, del oficial de enlace de la Guardia Civil en el EMAD, según fuentes militares. La decisión se tomó tras tener conocimiento de que el teniente coronel, dependiente de Interior, había formado parte del proceso de vacunación en esta institución militar. Tras recabar todos los informes pertinentes y analizar la documentación, el ministerio ha decretado su salida fulminante. Las mismas fuentes la justifican por la «falta de ejemplaridad». El oficial de enlace de la Guardia Civil en el EMAD es un cargo de libre designación nombrado por el ministerio, por lo que el militar será reintegrado en otra unidad del instituto armado con diferente cometido.