Que no nos roben la democracia – El Catalán: «Definitivamente no es una “fiesta”. Es otra cosa mucho más siniestra. Si ganan los golpistas nos aplicarán su “democracia”. Y ya hemos tenido una buena dosis en los últimos años. Es la “democracia” de las listas negras y de la exclusión. Del insulto y la intolerancia» / «Todo es muy “guay” y “democrático”. Lo de asaltar sedes de partidos de la oposición o las campañas que “señalan” a los no afectos al secesionismo, como la de Arran Lleida, solo merecen una nota a pie de página dentro del ambiente superenrollado que rodea a todo lo que huele a 1 de octubre» / «No queremos esa “democracia”. Queremos la democracia real, la del Estado de derecho. La que a pesar de sus imperfecciones nos ha permitido pasar en cuatro décadas de ser un país “en vías de desarrollo” a ser un país próspero y moderno. Queremos la democracia española. No la democracia de la ANC, Òmnium y los alegres chicos de la CUP que revientan autobuses turísticos y señalan a los discrepantes»

Instantánea del vídeo de la manifestación de mil personas a las puertas de la ANC. «No nos engañan: Cataluña es España». Por Sergio Fidalgo. -Elcatalan.es – 22 septiembre, 2017 – Reconozco que soy un oyente habitual de Catalunya Informació desde tiempos inmemoriales. Y en estos días me es útil para saber cuál es el argumentario diario… Leer más Que no nos roben la democracia – El Catalán: «Definitivamente no es una “fiesta”. Es otra cosa mucho más siniestra. Si ganan los golpistas nos aplicarán su “democracia”. Y ya hemos tenido una buena dosis en los últimos años. Es la “democracia” de las listas negras y de la exclusión. Del insulto y la intolerancia» / «Todo es muy “guay” y “democrático”. Lo de asaltar sedes de partidos de la oposición o las campañas que “señalan” a los no afectos al secesionismo, como la de Arran Lleida, solo merecen una nota a pie de página dentro del ambiente superenrollado que rodea a todo lo que huele a 1 de octubre» / «No queremos esa “democracia”. Queremos la democracia real, la del Estado de derecho. La que a pesar de sus imperfecciones nos ha permitido pasar en cuatro décadas de ser un país “en vías de desarrollo” a ser un país próspero y moderno. Queremos la democracia española. No la democracia de la ANC, Òmnium y los alegres chicos de la CUP que revientan autobuses turísticos y señalan a los discrepantes»