NOTA DE PRENSA
MINA JULITA
La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies estará vigilante si es que llega a funcionar la mina carbón Julita en Lena, autorizada en el día de ayer por la Comisión de Asuntos Medio Ambientales del Principado, con las condiciones habituales a estas explotaciones que la mayoría no suelen cumplir, porque saben el Principado traga con todo.
Una vez más, el PSOE se pliega a las presiones mineras, aprueba un proyecto que el Principado venía rechazando por sus impactos asociados. Desestima nuestras alegaciones al proyecto minero que hay recordar que esta al lado de dos espacios protegidos: el Parque Natural de Las Ubiñas – La Mesa y el paisaje Protegido de la Sierra del Aramo.
Se aprovecha de la necesidad de las mas de 1.000 personas que llevaron el curriculun al Ayuntamiento para entrar a trabajar, a pesar de que la empresa ya confirmo que espera como mucho generar 30 puestos en unos años, ya veremos en que condiciones son estos empleos, porque las minas de montaña subterráneas no se parecen a las minas actuales subterráneas.
Hay que recordar que esta explotación que ya en el año 2007 tuvo una resolución negativa del Principado y el año 2009 obtuvo la misma resolución del Ayuntamiento de Lena para la reapertura de la explotación por su impacto, ahora la empresa sin cambiar el proyecto ha tenido una respuesta positiva que quizás tenga que ver con las proximidades de las elecciones y los puestos de trabajo que dice que va crear. Tras la sorprendente repetición del tramite ambiental que fue rechazado en 2012 por las ausencias de información facilitada por la empresa.
Ahora la autorizaron se la han dado a pesar de:
– No se presenta un estudio de viabilidad económica, lo que no deja de ser sorprendente para valorar si es un proyecto real. No cuadra que un proceso de cierres de grandes minas existentes subterráneas que están mecanizadas, a la vez se pretenda reabrir una pequeña mina de montaña, sin una adecuada justificación del proyecto y el porque de esta singularidad que devuelve a las explotaciones de chamizo con los riesgos que supone.
– No se valora el impacto a las poblaciones próximas, a pesar que van usar explosivos, donde no se ha hecho un estudio completo y detallado de acústica ambiental y geológico que determine el impacto de las vibraciones en las poblaciones cercanas, es preciso un plan de control acústico en todas las fases del proyecto, con una adecuada planificación de los muestreos en las poblaciones mas cercanas de Valle, Tablao y Lindes.
– Va tener un gran impacto paisajístico, al estar previstas la apertura de tres bocaminas para la explotación de las capas Julita, Rosario, y 3ª. Así, se abrirán dos bocas en la capa Julita, una correspondiente a la galería base a cota 1.225 m y otra a la galería de cabeza, a cota 1.355 m; y una boca en la Capa Rosario, a 1.350 m. También se prevén 5 escombreras en los emboquilles.
– Es muy importante el impacto que pueda tener sobre la fauna, destacando la presencia del oso al poder afectar a la comunicación entre núcleos de población. En esta zona se gastaron varios millones de euros de fondos europeos en programas Life para recuperar la conexión entre la población occidental y oriental. se ha evidenciado que el Cordal de Lena, y concretamente el entorno inmediato de las instalaciones proyectadas por la explotación Mina Julita se ubica en una zona con presencia habitual de oso, Así mismo, las instalaciones de Mina Julita se ubican en el arranque del corredor interpoblacional cantábrico, concretamente en el pasillo septentrional del mismo que arranca en las inmediaciones del Puerto de la Cobertoria y discurre a lo largo del Cordal de Lena lo que imprime cierto carácter relevante a la zona en cuanto a dispersión de ejemplares se refiere.
– No se ha realizado el preceptivo trámite de aceptación social del proyecto, que resulta imprescindible de acuerdo con lo establecido en el Convenio sobre el acceso a la información, la participación del público en la toma de decisiones y el acceso a la justicia en materia de medio ambiente, hecho en Aarhus (Dinamarca) el 25 de junio de 1998, y ratificado por España el 15 de diciembre de 2004.
Como es habitual el Principado no hace sus deberes de vigilancia y control de las minas asturianas solo hay que ver el coladero que hay hasta ahora, por eso dudamos que las condiciones impuestas se lleguen a cumplir y los problemas ambientales no dejaran de aparecer en breve.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
