La Unión de Guardias Civiles en Galicia (UniónGC) y UGT han denunciado que dos agentes de la Guardia Civil de Tráfico destinados en la provincia de Pontevedra han visto reducido su salario en gran proporción por no alcanzar un tope de multas.
Los guardias civiles confirmaron así lo que la gran mayoría de los ciudadanos sospechaban y temían: ambos colectivos denunciantes sacaron a relucir como condenables las directrices que buscan «la recaudación forzada a costa del bolsillo del ciudadano».
El argumento de los superiores de los dos agentes afectados para explicar esta rebaja de sueldo es, según los colectivos denunciantes, el de «manifestar un bajo rendimiento a juicio del oficial al mando». Se entiende un bajo rendimiento a la hora de poner multas, cuantas más mejor, y al parecer venga o no venga al caso, e infrinjan o no los conductores las normas de circulación.
La Unión de Guardias Civiles en Galicia consideró una contradicción además que la reducción salarial de estos compañeros se corresponda con el mes de enero. Por vez primera en la historia de la provincia de Pontevedra, a lo largo de todo el mes no se ha producido ninguna víctima mortal en accidente de circulación en la red viaria.
Los dos guardias civiles que sufren en su sueldo no rebajarse a las demandas recaudatorias de los escalafones superiores contarán con la solidaridad de sus compañeros para pasar el trago. Se ha activado la llamada ‘caja de resistencia’, mediante la cual se recauda dinero entre los compañeros para compensar la pérdida económica.