El portavoz del grupo socialista en Les Corts, Manolo Mata, continúa manteniendo cierta distancia con el secretario general del partido en la Comunitat, Ximo Puig. Una prueba más de ello fueron sus declaraciones de ayer en las que se mostró partidario de «acelerar» el proceso para la celebración del congreso del PSOE. Sus palabras le situaron en una posición más cercana a la Comisión Ejecutiva del PSPV de la provincia de Valencia -que aprobó por unanimidad el pasado lunes que se lleve a cabo un comité federal de manera «inmediata»- que del líder socialista, quien se mostró contrario a acortar los plazos para convocar el cónclave.
Para Mata, el PSOE, «que es de sus militantes», debe «acelerar» el proceso para la elección de sus dirigentes y de su reflexión, aunque «no acelerarlo hasta tal extremo de que no haya ideas sobre la mesa, pero sí que haya ideas y dirigentes que puedan encaminar el procedimiento que venga». El síndic reconoció que no es partidario «de otro procedimiento exprés dentro de un mes», pero sí de que se haga en los plazos «lo más cortos posibles, para que la gente tenga propuestas, equipos, ideas y renovación».
Preguntado por este periódico sobre si sería una buena opción que una de las candidatas a dirigir el partido fuera la baronesa andaluza Susana Díaz, Mata contestó que «lo sería para ella».
El diputado del PSPV en Les Corts volvió manifestar ayer un criterio contrario al del presidente del Consell, como ya hiciera cuando decidió alinearse con Pedro Sánchez mientras Puig era uno de los 17 miembros de la dirección federal que abandonaba la ejecutiva 72 horas antes del comité federal del 1 de octubre que provocó la caída del ya exlíder de la formación.
Mata fue entonces uno de los dirigentes del socialismo valenciano a los que se vio más afectado por aquellos hechos, ya que en todo momento fue partidario del no a la investidura del candidato del Partido Popular Mariano Rajoy. Aunque nunca haya criticado públicamente al secretario general del PSPV, el diputado autonómico es de los pocos dirigentes del partido que se expresa con total libertad sobre cualquier asunto, algo que podría complicar su futuro dentro del mismo.
Sobre todo, teniendo en cuenta que el pasado mes de septiembre el portavoz socialista remitió un escrito a Puig en el que le informaba de su posición en relación con el debate que se abría en el PSOE respecto a la investidura y acompañó ese escrito con su propia renuncia, aunque sin firmar, al puesto de diputado en Les Corts, con la intención de que el presidente del Consell hiciera uso de ella en el momento que considerara oportuno.
Puig le mantiene por ahora
El mensaje que le trasladó Puig a Mata al recibir el escrito fue que estaba satisfecho con la labor que estaba desempeñando como portavoz parlamentario y que por ello rechazaba la dimisión. Sin embargo, esa postura podría dar un giro en cuanto el presidente deje de tenerle en buena consideración y se repitan varios movimientos como el que dio ayer con respecto a la fecha para celebrar el congreso del PSOE.
Desde el partido se barrunta que la salida de Mata de la portavocía del PSPV coincidirá con el parón de la actividad en Les Corts con motivo de las fiestas navideñas, aunque a día de hoy el síndic está tranquilo: «Mientras crean que lo sigo haciendo bien, como ahora, seguiré».
El síndic socialista asumió ese rol en el grupo parlamentario en el arranque de la actual legislatura y durante este año y medio no sólo se ha convertido en uno de los escudos más importantes para el jefe del Ejecutivo valenciano, sino que su papel ha sido determinante para contribuir a limar asperezas en las relaciones entre el PSPV y Compromís.
Origen: Las Provincias