• Remarcó que el Gobierno gallego va a reconocer el esfuerzo que en las circunstancias actuales suponen las licitaciones que se produzcan en el alta velocidad a Galicia, pero en ningún caso va a ser cómplice de mantener un plazo irreal
• Quedan pendientes de licitar 2.486 millones de euros, lo que supone el 74% del presupuesto que se debería haber licitado en 2010 y el 53% del presupuesto total del Pacto del Obradoiro
• El consejero remitió una carta al secretario de Estado solicitando una reunión de la Comisión de Seguimiento del Pacto del Obradoiro para detallar de forma realista y precisa las previsiones que maneja Fomento
• Reitera que el AVE no estará terminado hasta comienzos del año 2018 y eso desde los supuestos mas favorables, que parten de la reducción al mínimo de los plazos, rendimientos estándar en el avance de las obras y el empleo de hasta 9 máquinas tuneladoras simultáneamente, entre otras consideraciones
• Recordó que el estudio se le hizo llegar al Ministerio “sin que hasta lo de ahora se nos haya acercado ningún otro documento alternativo que contradiga y defina con la misma precisión los datos expuestos por los técnicos de la Xunta de Galicia”
• Reconoció la voluntad del ministro de agilizar el alta velocidad, pero recordó que buena parte de las dificultades actuales tienen su origen en la parálisis de un proyecto que estuvo olvidado en un cajón durante un período expansivo de nuestra economía
• Hizo mención a las incertidumes en relación con la financiación, ya que resulta imposible garantizar la solvencia del ADIF para mantener el nivel previsto hasta el 2015 en un momento en que se está poniendo en tela de juicio la capacidad financiera del Estado español
• También recordó las dificultades técnicas de los más de 100 kilómetros que restan por ejecutar, de los que cerca del 70% corresponden a túneles y viaductos,
• A eso hay que añadir el hecho de que tres de los cuatro subtramos entre Lubián y Puerto aún están en fase de proyecto, mientras que el subtramo Taboadela-Ourense se encuentra en fase de estudio informativo

Santiago, 26 de julio de 2011.- El consejero de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín Hernández, solicitó hoy en la Comisión de Infraestructuras del Parlamento de Galicia la colaboración de todos los grupos para reclamar la puesta en servicio del AVE en los plazos mínimos que la técnica actual permita, habida cuenta el retraso que en estos momentos registra la licitación de los tramos pendientes.

Señaló que el principal deber de los representantes públicos y la lealtad con los ciudadanos, que en el caso del alta velocidad pasa por reconocer que en estos momentos, transcurrida ya la mitad del año 2011, quedan pendientes de licitar 2.486 millones de euros repartidos en 24 tramos, lo que supone el 74% del presupuesto que se debería haber licitado en 2010 y el 53% del presupuesto total del pacto del Obradoiro, lo que hace prever que “en el año 2015 el único AVE que circulará por Galicia será el AVE interior y aún existen ciertas dudas sobre la funcionalidad de la totalidad del Eje Atlántico”.

En estas circunstancias, el consejero explicó que acaba remitir una carta al secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, solicitando una reunión de la Comisión de Seguimiento del Pacto del Obradoiro para detallar y definir de forma realista y precisa las previsiones que maneja el Ministerio de Fomento en relación con estas obras de tanta trascendencia para el conjunto de Galicia y para el equilibrio territorial del Estado español”.

Hernández dedicó una parte importante de su intervención a hacer un repaso del informe realizado por la Xunta “con la mayor objetividad y realismo” para determinar las posibilidades de cumplir el horizonte de puesta en servicio que marca el Pacto del Obradoiro, informe que concluye que el AVE no estará terminado hasta comienzos del año 2018. Remarcó que esta conclusión se asienta sobre los supuestos mas favorables, es decir, aquellos que parten de la reducción al mínimo de los plazos de los trabajos pendientes, rendimientos estándar en el avance de las obras y el empleo de hasta 9 máquinas tuneladoras simultáneamente, entre otras cuestiones.

Recordó que este amplio estudio, en el que se detallan las previsiones para cada uno de los tramos y se acompaña con un cronograma concreto para cada una de las actuaciones, se le hizo llegar al Ministerio de Fomento “sin que hasta lo de ahora se nos haya acercado ninguno otro documento alternativo que contradiga y defina con la misma precisión los datos expuestos por los técnicos de la Xunta de Galicia”.

Consideraciones políticas, técnicas y económicas
Agustín Hernández afirmó que la situación en la que se encuentra esta infraestructura no es fruto de la casualidad, sino que se deriva de tres tipos consideraciones que resumió cómo políticas, técnicas y económicas.

En el primer caso, reconoció la voluntad política del actual ministro de Fomento de agilizar el alta velocidad, pero recordó que tal vez llega tarde, en un momento de honda crisis económica y después de mas de cinco años de bonanza y de presupuestos expansivos en los que, “como resultó evidente para todos, desde el ministerio no se actuó con la dedicación y el empeño que una obra de estas características y trascendencia requería”. Afirmó que buena parte de las dificultades actuales tienen su origen en la parálisis de un proyecto que estuvo olvidado en un cajón durante un período expansivo de nuestra economía.

Además, puso en tela de juicio las prioridades del Gobierno del Estado, que destinó una enorme cantidad de fondos a obras menores que finalmente tuvieron escasa relevancia en la reactivación de la economía. Sí los mas de 13.000 millones de euros que se dedicaron a hacer aceras a través del Plan Y se hubieran empleado en agilizar el AVE, España contaría con 800 kilómetros de AVE adicionales y en estos momentos Galicia estaría mucho mas cerca de contar con el alta velocidad”.

Respeto de las consideraciones técnicas, el consejero hizo referencia a las enormes incertidumbres y retos que plantean unos tramos de gran complejidad, toda vez que las obras pendientes entre Lubián y Ourense, que suman mas de 103 kilómetros,obligan a ejecutar 67,5 kilómetros de túneles (el 65% del itinerario) y 5,5 kilómetros de viaductos. Añadida a las dificultades que presentan las obras de la plataforma, señaló además la circunstancia de que tres de los cuatro subtramos entre Lubián y Puerto aún están en fase de proyecto, mientras que el subtramo Taboadela-Ourense se encuentra en fase de estudio informativo.

Por último, hizo mención a las incertidumbres que están abiertas en relación con la financiación, asegurando que en una situación de reformulación y reprogramación generalizada de todas las administraciones públicas, y en un momento en que se está a poner en tela de juicio la capacidad y la fortaleza financiera del Estado español, resulta imposible garantizar la solvencia financiera del ADIF para mantener el nivel previsto hasta el 2015, habida cuenta las reprogramaciones, retrasos y rescisiones que se están produciendo en todo el sector público estatal.

El responsable de Obras Públicas de la Xunta de Galicia remarcó que el Gobierno gallego va a reconocer el esfuerzo que en las circunstancias actuales suponen todas y cada una de las licitaciones que se produzcan en el alta velocidad a Galicia, pero en ningún caso va a ser cómplice de mantener un plazo irreal.

Repaso histórico
Hernández hizo un repaso histórico de los diferentes hitos que llevaron a la poner a Galicia en el mapa del alta velocidad, recordando que ni el Plan Director de Infraestructuras de 1994 ni el Plan de Infraestructuras Ferroviarias diseñado por Josep Borrell en 1996 contemplaban la llegada del AVE a nuestra comunidad.

En 1998 se inició una línea de colaboración a través del acuerdo entre la Xunta y el Ministerio de Fomento dirigido por Arias Salado para la mejora de la red ferroviaria interior de la comunidad autónoma, con la firma de un acuerdo por un importe de 432 millones de euros, que tuvo su continuidad en un convenio posterior del año 2000 para acometer la reforma interior ferroviario de Galicia por importe de casi 1.000 millones de euros. Los pasos definitivos se dieron en el año 2001, con la firma entre el presidente Fraga y el ministro Álvarez Cascos del documento Viaria que fijaba el compromiso de incluir el AVE a Galicia en el Plan de Infraestructuras 2000-2007.

También en el año 2001, el 21 de julio, se colocó la primera traviesa del alta velocidad en territorio gallego por parte de Fraga y Aznar, con el que se iniciaba la modernización del Eje Atlántico, y en enero de 2003 se aprobó el Plan Galicia, que incluía el acurtamento de plazos en las actuaciones del AVE. Además, se tomó la decisión de avanzar simultáneamente en las obras del alta velocidad hacia el centro de España desde ambos extremos, lo que llevó a licitar en el año 2004 el tramo Santiago Ourense.

Ante la ralentización de los trabajos de conexión con la Meseta registrada entre los años 2005 y 2009, coincidiendo con la etapa de Magdalena Álvarez al frente del Ministerio, el actual Gobierno de la Xunta abogó por formalizar un acuerdo centrado en el alta velocidad, que le fue dado a conocer al presidente Zapatero por el presidente Feijóo, y que incidía en la colaboración interadministrativa para agilizar los tramos pendientes de la ansiada llegada del AVE a Galicia. Dicta propuesta se acabó por concretar en un documento de consenso entre la Xunta y el Ministerio de Fomento conocido como Pacto del Obradoiro, firmado el 21 de julio de 2009.

AVE y autovías con la Meseta
Hernández terminó su intervención haciendo un paralelismo entre el AVE y las autovías de conexión con la Meseta, señalando que los diferentes trechos de autovías se comenzaron en paralelo desde Castilla hacia Galicia y desde nuestro territorio hacia Castilla y que, al igual que en el AVE, los trechos mas complicados se dejaron para el final.

Afirmó que en el año 1996, un nuevo Gobierno “tuvo que sanear las cuentas públicas y completar las autovías en el 2001. Ahora mucho me temo que va a pasar lo mismo. Tendrá que llegar un nuevo Gobierno a España para sanear las cuentas públicas y terminar el trecho mas complicado de la conexión de AVE con Galicia”.

Calificó su diagnóstico como “la descripción realista del momento en el que nos encontramos.Un Gobierno en el descuento, con un ministro que el único que tiene es voluntad política. El Gobierno de España no tiene ni tiempo ni solvencia financiera. Únicamente está gestionando la prórroga para poder tener discurso en el futuro. Pero que quede claro, si Galicia no dispone hoy de conexión de alta velocidad es únicamente por culpa de los Gobiernos socialistas”, concluyó.