El PP de rodillas ante Bárcenas

Pablo Sebastián

El bochornoso espectáculo que ofrece el Partido Popular ante el llamado ‘caso Bárcenas’, o de la presunta financiación ilegal de este partido en los tiempos de las presidencias de Aznar y Rajoy, nos lleva a la conclusión de que el escándalo es mucho más grave de lo que imaginamos. Por cuanto puede afectar al hoy presidente del Gobierno de España y a otros dirigentes de esta formación política, incluido el expresidente del Gobierno José María Aznar, y algunos ministros de uno y otro gabinete.

Desde luego lo que está pasando con este escándalo -que a buen seguro podría ser el motivo principal de la visita de la vicepresidenta Sáenz de Santamaría a la canciller Merkel en Berlín- es impensable que ocurra en una democracia europea de nuestro entorno, pero en España la Justicia suele estar al servicio del poder y no existe la responsabilidad política.

Tan grave es la situación que al PP no le importa humillarse y ponerse de rodillas ante Luis Bárcenas -al que no se atreven ni a mencionar por el pánico que le tienen- lo que nos conduce a la conclusión de que Bárcenas -que además parece haberse hecho multimillonario a costa del PP- tiene en sus manos la cabeza del presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy. Y no sólo porque pueda ser un chantajista sino porque puede tener pruebas con las que podría chantajear. Y este país, en las circunstancias políticas, económicas e institucionales en las que estamos, no puede permitirse tener sentado en el palacio de la Moncloa a un presidente bajo la amenaza de un presunto delincuente.

Sólo esto explica que, después de la bronca ruptura del PP con su ex gerente y ex tesorero de los últimos veinte años, Luis Bárcenas (con el añadido rocambolesco espectáculo de los despidos y los finiquitos variables), ni Rajoy ni el PP se hayan atrevido a presentar ‘querella’ en contra de Bárcenas después de llevar varias semanas anunciándolo. Y sólo se hayan limitado a poner unas ‘demandas’ en contra del diario El País y contra el presunto e ignoto autor de los documentos de la pretendida contabilidad ‘B’ del PP. La que, había anunciado El Mundo (diario al que el PP no demanda), que fue publicada por El País, y donde aparecen ingresos opacos del PP muy superiores a lo permitido por ley -de ahí la presunta responsabilidad penal de Rajoy como presidente del PP-, además de sobresueldos y ayudas para el pago en dinero negro a destacados dirigentes del partido.

Una contabilidad en ‘B’ que: Sólo podía estar escrita por Luis Bárcenas; en la que se aprecia claramente su caligrafía; que ha fue confirmada por el abogado Jorge Trías ante la Fiscalía; que fue registrada por el propio Bárcenas ante notario de Madrid el pasado mes de diciembre; y que perece incluir en todas sus páginas la conformidad del otro tesorero Alvaro Lapuerta.

La pregunta que cabe hacer al respecto y después de todo lo ocurrido es la de: Después del enorme daño que Bárcenas ya le ha hecho al PP -en venganza por el abandono de Rajoy a su situación procesal y a la de sus amigos de Gürtel- ¿qué es lo que temen Rajoy y el PP de Bárcenas? Pues su confesión ante un juez y la aportación de otras pruebas incluidos los  ’recibís’ de los citados sobresueldos, firmados por ciertos dirigentes, lo que ya circula por Madrid como una realidad. Y si todo esto se presenta ante un juez Rajoy no tendría más salida que dimitir.

Y como todo ello parece ser cierto -lo confirman en privado algunos destacados dirigentes del PP-, Rajoy, que sabe mejor que nadie lo que conoce y tiene Bárcenas en su poder, debe actuar en consecuencia y cuando antes y decidir si debe asumir él las responsabilidades del caso. De lo contrario y si estalla el escándalo en los juzgados y en todos los medios de comunicación el problema no será solo de Rajoy y de algunos dirigentes del PP de ahora y de antes, sino del Partido Popular en su conjunto que saltará por los aires.